Con el concepto de Imagen, quizá pienses que vamos a hablarte en este artículo, de cómo afrontar una Reforma en la Farmacia. Este tema lo trataremos más adelante, en otros artículos, pero en éste, vamos a hablar de la importancia de Observar. Este es probablemente el deporte nacional más común en el  80% de la población.

Si lo pensamos,  mientras esperamos nuestro turno para pagar, en la cola de caja de Mássimo Dutti  o Mercadona, la mayoría de nosotros solemos hacer  lo mismo. Es probable que muchos me digáis que mirais el móvil mientras tanto, y lo doy por supuesto por válido, porque la utilización de las tecnologías en los tiempos muertos de espera,  es sin duda, una realidad.

Pero hay un porcentaje significativo de población, que en este intervalo de espera, se dedica a lo mismo: observar al empleado que está atendiendo (o en su defecto, a la persona que tenemos delante de nosotros esperando).

La Observación, se convierte en  una de las herramientas que utilizamos para emitir juicios de los demás. ¿Justos/Injustos?  Pues evidentemente no siempre estarán ajustados a la realidad, pero debemos de hablar de ello para prevenir valoraciones que puedas considerar injustas de los clientes de tu Farmacia. Cuando hablemos de Observador de ahora en adelante, nos estaremos refiriendo al  ClienteEl observador, se creará una opinión de tí en su cabeza, te posicionará.  

Pongamos un ejemplo:

Llegamos a una farmacia y vemos que nos toca esperar, sólo hay un empleado en mostrador y hay 5 personas delante. La maquinaria de la Observación, se pone en funcionamiento.

  • El observador, echará una breve ojeada al espacio, a los productos, a las instalaciones. Si no hay nada que le llame la atención, volverá a dirigir su mirada a mostrador. Es así de simple. En este sentido, sabemos que es una obviedad, pero como a veces lo que parece obvio se nos olvida, lo recordamos: el orden y la limpieza de los espacios, pueden ser grandes potenciadores de la venta o convertirse en cambio en causa de ventas perdidas.  Dedícale tiempo.
  • El observador iniciará a continuación  el proceso de evaluación del empleado ¿tiene el pelo limpio? ¿arreglado? ¿ como es su piel?  Si es una mujer, ¿está maquillada? ¿Tiene ojeras? ¿tiene las uñas pintadas? ¿Tiene gafas? ¿Son bonitas? ¿sonríe? ¿parece amable? ¿Es rápido? ¿es simpático? …etc

El Observador, en esos minutos, ya se ha hecho una idea en su cabeza, y probablemente haya tomado algunas decisiones:

  • Decidirá si pregunta en esa farmacia por un champú adecuado a su cabello: ¿ crees que le pedirá consejo si ve que el cabello del empleado no está en buenas condiciones? Muy probablemente, NO.
  • Decidirá si le conviene que le asesoren en una crema de noche: “ la empleada  tiene una piel espectacular, seguro que ella sabe bien lo que me conviene”.
  • Decidirá si le pide consejo en algo o simplemente le pedirá lo que el médico le ha prescrito: ” no parece muy agradable… mejor no le pregunto”
  • etc…

Bien es cierto que la Observación por sí sóla, no debe ser jamás,  la única herramienta de análisis que utilicemos, ya que hay gran cantidad de información que se quedará desierta, sin analizar. Pero si hablamos de esa primera entrada a una farmacia,  la primera impresión  hay que trabajarla y mucho.

“ Nunca hay una segunda oportunidad para causar una buena impresión” Oscar Wilde

La Imagen, sí cuenta, y se debe organizar, debatir, comentar, evaluar…etc, igual que el resto de áreas de la Farmacia. El Observador, podemos serlo,  cualquiera de nosotros

Cristina Chouciño Carril

Dpto. Financiero, Ventas y Marketing