Stephen Covey, nos explica en su Principio 90/10, que un 10% de tu vida es lo que pasa en ella, y un 90% de tu vida consiste en lo que haces con eso que te ocurre. Esto cobra una gran relevancia en estos momentos, en unas circunstancias totalmente nuevas para todos nosotros, seas del sector que seas. El COVID-19, ha llegado para sentar un precedente sin igual y para ir sentando las bases de un futuro próximo.

Aún es pronto para establecer conclusiones de esta situación, pero sí podemos realizar algunas valoraciones que seguramente están ya en la cabeza de muchos.

En estos momentos, una parte importante de la población permanece confinada en su domicilio, en diversas circunstancias profesionales (teletrabajo, situaciones de ERTE, vacaciones, permisos retribuidos, despidos…etc).  Personas que afrontan además  esta situación en condiciones personales diversas, algunos solos,  y otros en compañía de sus familias. Ni que decir tiene que, todos, nos hemos tenido que adaptar obligatoriamente a esta situación en cuestión de horas o días. 

 A parte, nos encontramos con aquellos profesionales que en estos momentos, no pudiendo optar al teletrabajo, están acudiendo diariamente a sus puestos de trabajo, por tratarse de actividades esenciales. Aquí hay que poner de relevancia una idea que no se nos puede olvidar a ninguno cuando esto termine: a todos estos profesionales, independientemente del puesto que ocupen,  nadie les preparó para esto. El esfuerzo que están realizando, a nivel personal y laboral, es mucho mayor de lo que alcanzamos a imaginar. Estamos seguros que ellos nos contarán más adelante sus historias, y esas historias, hablarán de personas que dieron mucho más allá de lo imaginable, de lo que ellos mismos imaginaban que podrían dar. Y entonces, nos daremos cuenta de la gran capacidad de adaptación del ser humano ante situaciones adversas. 

Las circunstancias, nos exponen ahora mismo a todos, a un impacto emocional muy fuerte. Dependiendo de las habilidades y estrategias de afrontación que tengamos cada uno de nosotros, saldremos más o menos “perjudicados”. Pero lo que está claro, es que nunca volveremos a ser los mismos.

 ¿Qué papel juegan las empresas en esta Crisis?

Las empresas son como sus líderes. Este es un momento, en el que los Líderes y sus Valores Empresariales, se encuentran en un punto de inflexión de difícil retorno. Cuando todo esto amaine, en la cabeza de cada uno de nosotros, perdurarán recuerdos positivos de empresas que dieron un paso adelante demostrando que sus valores inundan transversalmente su empresa, y que además, supieron llegar a las necesidades y al  corazón del consumidor

En este momento, nos estamos dirigiendo a un consumidor, que no es el mismo de hace 15 días. Es un consumidor que presenta unas necesidades diferentes y que tiene todos los sentidos a  “flor de piel”. 

Como Empresa, tenemos a un Equipo de personas que trabajan con nosotros y que ahora más que nunca, hay que cuidar. Quizá no logremos eliminarles la “angustia” con la que acuden a su puesto de trabajo en estos momentos, pero lo que sí está en nuestra mano, es que se sientan orgullosos de ellos mismos, de sus compañeros y de su empresa.

Como Empleado, haz que el líder y tus compañeros, se sientan orgullosos de trabajar a tu lado. Ya sabemos que siempre hay quien pone 10 problemas a 1 solución. Pero este es el momento de que entre todos deis varias soluciones a un mismo problema, y que el líder sienta, que no rema solo.

Quienes tengan esto claro, y actúen en consecuencia, saldrán reforzados de esta crisis que estamos viviendo.

 ¿Qué pasará en un futuro próximo?

Aún es pronto y no hay que precipitarse a la hora de sacar conclusiones. Pero de momento, hay factores que habrá que valorar y estar pendientes a su evolución. Por ejemplo: El consumidor actual, está teniendo nuevas experiencias de compra: ¿Cuánta gente conoces que nunca había comprado online y que en los últimos 15 días ha hecho varias compras a través de ese canal? ¿Volverán estos consumidores a comprar en tienda física o se acostumbrarán a hacerlo online?

En el caso de la Farmacias, por ejemplo, es muy probable que la visión que la población está teniendo de este sector, haya cambiado de manera importante. Es cierto que están existiendo quejas de clientes que acusan una subida de precios, pero ya hay profesionales del sector que han explicado a que se debe esto, se trata de una subida en mucho casos, totalmente ajena a la voluntad de nuestro farmacéutico. Esto podemos verlo con claridad en el artículo de ¿Por qué me suben el precio de las mascarillas en la farmacia? . La figura del farmacéutico, su papel como líder, sus valores, saldrán reforzados. Son profesionales de la Salud, como siempre se les tuvo que valorar, y como el presente y el futuro les valorará.

Esperaremos más para valorar hacia donde tenemos que remar todos. Aunque de momento, como en todas las crisis, ya sabemos que ésta no es sólo una Crisis Económica es también una Crisis de Valores. Aprovechemos para sacarles brillo y sacar a relucir nuestros Valores Empresariales.

 

Cristina Chouciño Carril

Dpto. Financiero/Marketing y Ventas

J&D Consulting